La Parejita Podemita, el poder, el feminismo, el CNI, la Monarquía, Amancio Ortega y el Coronavirus

Luisondome


Pablo Iglesias, también conocido como El Coletas, por fin se ha puesto el traje para salir en la rueda de prensa a la que se hizo invitar para sacar pecho y salir en la foto, contándonos durante un buen rato una historia (a modo de un anuncio de la Insuperable de Jazztel) para lo cual sacó del armario un traje negro que lució en esta ocasión en lugar de sus habituales vaqueros, pues con este terno solo se le vio en la Gala de los premios Goya con pajarita al cuello. 

Un traje de estas característica sirve también para lucir luto, pues no está la cosa para galas, salir de vaqueros pues tampoco pega, y por eso le pareció el equipamiento mas adecuado. Una vez logrado su objetivo principal, que no es otro que el de hocicar en el CNI, y tras la feminista manifestación del 8M cuyas consecuencias ahora estamos pagando, toca ahora llevarse el mérito del improbable éxito en el hipotético caso de que este aconteciera, y estar al quite para echarle la culpa al maestro armero en el caso de que vengan mal dadas y siga creciendo el parte de bajas que no para de aumentar. 

Su colaboración en el Gobierno es brillante. Se salta la cuarentena a la que está obligado por razón de tener a su mujer contagiada por un Coronavirus, probablemente adquirido en la susodicha manifestación feminista que tanto se empeñaron en sacar adelante a pesar de las recomendaciones de que fuera desconvocada, pero claro, después de tanto trabajo en organizarla, no la iban a parar, pero por eso se fue como digo, al Consejo de Ministros saltándose la cuarentena. Pero claro, ese día tenía que lograr su blindaje dentro de la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos de Inteligencia, aprovechando la oportunidad del Decreto Ley de medidas urgentes para hacer frente al impacto social y económico del coronavirus, presionando para modificar la Ley que regula el CNI. 

Por eso se saltó la cuarentena. Igual da que le pase el bicho a los Ministros mas cercanos, no ideológicamente sino posicionalmente, mandándolos a la cuarentena que el no quiso cumplir. Fue al Consejo, y se salió con la suya.

Después, era para el imprescindible ir a la rueda de prensa en Moncloa para salir en las teles a que se le viera bien, gobernando, que es como le gusta que se le vea y para lo que lleva conspirando tanto tiempo, total para no contar nada, no aportar nada en un tema en el que no tiene ninguna responsabilidad, pues su área de gobierno abarca otros asuntos que están ahora en quinto plano de la importancia en la Agenda de Gobierno. 

Echa de menos la televisión y se le notó un güevo, ya que tiene que continuar chupando cámaras durante el mayor tiempo posible, pues ahora tiene nuevos objetivos en su punto de mira, el Objetivo España es una República, para lo cual hay que echar una manita y ayudar a cargarse al Rey que no soporta y por ende a la Monarquía promoviendo caceroladas nocturnas, siendo el segundo objetivo el denostar a Amancio Ortega y familia, las personas mas generosas del País, que además de pagar puntualmente los impuestos que por ley tienen que pagar, ponen a sus fabricas en China a confeccionar  el material sanitario que tanta falta hace en los hospitales y centros sanitarios, mientras siguen pagando el salario de los trabajadores no utilizando de momento la posibilidad de los ERTES que otros grandes empresarios están utilizando para ajustar gastos. Pero claro, esto a los Iglesias-Montero, y a otros adláteres como Monedero, les pone de quicio y les resulta insoportable tanta generosidad.

Y con la que está cayendo, ¿que hace Pablo Iglesias para ayudar en la lucha contra la pandemia? Pues incordiar, que eso se le da muy bien. Alguien podria pensar que es que no le dejan hacer otra cosa, a lo que yo respondo que menos mal. Pero claro, nunca pensó (al menos cuando negociaba los puestos del Gobierno) que el Ministerio de Sanidad, o el de Transportes, o cualquier otro relacionado con la gestión de la pandemia iban a ser tan importantes, pues si lo hubiera siquiera intuido, los hubiera reclamado para si, incluso a cambio de su Vicepresidencia.

Algún día se sabrá con pelos y señales la verdadera historia de este asunto. Pero lo que si está claro es que los ciudadanos tendremos que exigir cuentas a Pablo Iglesias y a todos los demás gobernantes de su gestión en esta pandemia, y cobrarnos con nuestro voto las piezas que haya que abatir y echarlas sino de la política (pues tienen sus fans que les jalean) si al menos del Gobierno y del Parlamento, no por la fuerza, sino por la fuerza del voto. Hasta que ese día llegue, yo lo dejaría encerrado una buena temporada en el Reformatorio de Internet, aunque soy de los que piensa que este no tiene remedio.

ADÉNDUM

Hace apenas media hora que finalicé este artículo, y tras echarle un vistazo al BOE de hoy, me encuentro con esta Disposición del Ministerio de Justicia sobre el Ejercicio del Derecho de Gracia que afecta a aquellos condenados y presos que solicitaron el indulto, y cuyos procedimientos fueron paralizados por la declaración del Estado de Alarma por la pandemia por COVID-19, y que adjunto.



Es una tomadura de pelo. A lo mejor es a cambio de que Torra y Puigdemont dejen al gobierno tranquilo durante la crisis. Dado que el Gobierno es solidario en sus decisiones, repartamos culpa entre todos ellos.

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