Su Sanchidaz el Presidente del Gobierno, pontificando de nuevo sobre la vacunación ayer en rueda de prensa

Por Luis Domenech / Abril 7, 2021

Ayer el Presidente Sanchez hizo una utilización política de la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros para atribuirse el mérito de la vacunación masiva en España. No tiene este Gobierno prácticamente competencias en asuntos de sanidad, pues estas son de las Comunidades Autónomas, que son las que diseñan, organizan y llevan a cabo los planes de vacunación de su población. No tiene mas poder que su voto y su verbo en el Consejo Europeo frente al de  los 26 restantes para decidir sobre la compra de vacunas. No las compra el, ni él decide que vacuna se compra, sino la Unión Europea que después las reparte entre los gobiernos de cada nación. 

¿Que poder tiene entonces Sanchez para atribuirse el mérito? 

El de atribuirse los méritos ajenos, escabulléndose  de los deméritos propios. Podría proponer legislación que mejore la gestión de la pandemia y ayudar a sacarla adelante. Las Comunidades Autónomas le vienen pidiendo una legislación específica que les permita controlar situaciones sanitarias de emergencia como la de la actual pandemia, pero hasta ahora, y a tenido tiempo a lo largo de la pandemia, no a movido un dedo en ese sentido. En Mayo finaliza el Estado de Alarma, y ya se verá que herramientas le deja Sanchez a las Comunidades para controlar en sus territorios las situaciones de emergencia. 

Tiene los Decretos-Ley, pero estos son utilizados principalmente para solucionar asuntos políticos, muchos de los cuales nada tienen que ver con la pandemia, como el decreto ley firmado a mediados de Marzo de 2020 destinado combatir los efectos del coronavirus en la economía, pero en el que en una disposición final coló una fórmula que blinda la presencia de Pablo Iglesias en la comisión que controla al CNI. Este es un ejemplo de los muchos abusos cometidos que le permitió gobernar mediante Decretos Ley a lo largo de todo el estado de alarma.

Tiene poder para asignar recursos económicos para la investigación de vacunas y tratamientos frente a Covid, pero el dinero asignado a esta tarea es gravemente insuficiente. Al virólogo Rafael Juanes y su laboratorio solo se le asignaron 800.000 euros para el principal proyecto español de vacunas. Tiene poder para solucionar los estropicios económicos que la pandemia causó a los empresarios y trabajadores.

Tiene poder para respirar las múltiples heridas causadas por la pandemia en el tejido social y productivo de este país. Pero la mayoría de empresas y trabajadores aún están esperando por estas ayudas. Prometió que nadie se iba a quedar atrás por causa de la pandemia, y el país está a rebosar de damnificados que lleva a rastras.

Tiene poder para muchas cosas, pero en demasiadas ocasiones este poder ha sido mal utilizado. Como cuando se dedicó a gestionar compras, y no hizo mas que meter la pata. Recordemos el fiasco de las mascarillas allá por los meses de febrero y marzo del 2020, problema que le solucionaron en un principio empresarios como Amancio Ortega que movió sus contactos en China para comprar con su dinero mascarillas y traerlas en aviones fletados por el. Recordemos la falta de EPIS en los hospitales, con los sanitarios envueltos en bolsas de basura de plástico para protegerse. Recordemos la falta de respiradores que hizo que muchos enfermos murieran por falta de material de soporte vital. Recordemos la falta de personal sanitario, lo que llevó a muchos de los trabajadores al agotamiento dadas las duras jornadas interminables de trabajo.

Recordemos el fiasco de los datos proporcionados por el ministerio, con muertos que entraban y salían de las estadísticas, repartiendo las culpas de los errores a diestro y siniestro, sin que el gobierno asumiera la mas mínima culpa. Pensemos en el inefable Fernando Simón y sus continuos y contradictorios patinazos verbales, o los del anterior Ministro Illa, ahora dedicado a los asuntos catalanes. Nos han mentido una y otra vez, nos han llenado el garaje de motos que no nos han llevado a ninguna parte. Nos han ocultado los nombres del famoso Comité de Expertos que nunca existió.

Y mientras tanto Su Sanchidaz continúa sacando pecho en las ruedas de prensa

Íbamos a estar vacunados todos a la llegada del verano y esa maravilla prometida en segunda ola  sería la puerta de entrada de un necesitado verano y de nuestra recuperación turística y hostelera. Un sueño imposible con este gobierno al timón. Primero porque en medio de todo esto, vino una tercera ola. Segundo,  porque ayer nos anunció que estaríamos vacunados hacia el final del verano, cuando se inicia una cuarta ola. Solo cambió una palabra de su frase Sanchez el vacunólogo: cambió llegada por final. Pero ese único cambio suponen tres meses de retraso, llevándose por delante el verano entero, y con el nuestros sueños de descanso y disfrute aunque fuera con limitaciones. Ahora afirma que  entre Abril y Septiembre llegarán a España 87 millones de dosis, sin ningún rubor, como si las farmacéuticas estuvieran cumpliendo con los plazos de entrega de las vacunas. Una vez mas una declaración suya señala como mentira algo dicho por el anteriormente, y no es la primera vez que ocurre, y volverá a suceder cuando esta última declaración podamos comprobar que tampoco se ha cumplido. Pero como dice Herrera en la COPE, que nos la cuele tres o cuatro veces, puede que sea por error suyo, o por casualidad. Que nos la cuele 400 veces es culpa nuestra, y no aprendemos.

La utilización política de la desgracia ajena

Y para el colmo de los males, un revuelo político en Murcia, un quítate tú, que me pongo yo, causa una tormenta política en toda la Nación que trae como consecuencia una cascada de intentos de mociones de censura en Comunidades Autónomas gobernadas por el Partido Popular, unas fracasadas y otras que quedaron en el intento, y una convocatoria de elecciones en Madrid, por un mala jugada política ideada entre Sanchez y su Spin Off Iván el Redondo, al que no todo le sale siempre así, cuando vio la posibilidad de quitarse de encima a la molesta Presidenta Ayuso que cuestionaba una vez tras otra sus decisiones. Así lo entendió Ayuso cuando se olió la tostada y respondió a la jugada con un raquetazo a bote pronto firmando una convocatoria presentada de inmediato, lo que les pilló a los socialistas con el calzón bajado. Pensaban que tenían asegurada la moción de censura que les permitiría hacerse cargo del poder, y ahora tienen que gastar energías y dinero en una nueva convocatoria electoral de la que probablemente no salgan muy bien parados los socialistas y podemitas, y de la que espero salgan escaldados y jodidos por una buena temporada.

Los madrileños tienen en estos momentos la llave de paso del tipo de energía que debe de mover este país. Si el PP obtiene la mayoría absoluta, cambiará el rumbo político del país. Los de Casado saben que deben de continuar las políticas sociales que no veo en peligro con ellos en el poder bajo estas circunstancias. Sin embargo, el poder económico tomaría buena nota de la señal enviada por la ciudadanía, y posibilitaría una mas rápida y enérgica recuperación económica, 

Hoy pocos creen  que los socialistas sean capaces de solucionar los enormes problemas de crecimiento económico y de futuro que tiene la sociedad civil. Ayuso quiere darle a los madrileños un gobierno al estilo Feijóo, y puede que estos quieran concederle este deseo. Espero que así sea, y que los socialistas se vayan a la oposición, que es donde mejor se aprenden  las lecciones que los madrileños les han querido dar.

Yo cambiaría el lema que sirve de fondo de la fotografía de encabezamiento de este artículo. Lo sustituiría por "Si cambiamos a Sanchez, nos protegemos todos".