Periodismo y periodistas: Danas, ciclogénesis explosivas, vaguadas polares, fajanas, tubos lávicos…

Tubos lávicos, fajanas, bombas volcánicas...

Por Luis Domenech

Nov 6, 2021. De un tiempo a esta parte, los debates públicos en torno a la meteorología, el coronavirus, la economía, la vulcanología, etc., se están volviendo cada vez más técnicos, lo que  en parte se debe, al tratamiento que la prensa, la radio y sobre todo la televisión le está dando a estos temas, acudiendo a menudo a expertos con tendencia a utilizar términos complejos que memorizan los periodistas y conductores de programas de televisión en una búsqueda de una mayor atención pública, creando espectáculo a partir de la noticia. Por otro lado, vivimos un proceso análogo a otras ramas del periodismo científico: como hemos visto con la crisis del coronavirus, los términos técnicos abundan en la comunicación de lo que va pasando, o mas reciente mente con el tratamiento que los medios le están dando a la erupción del Volcán Cumbre Vieja en la isla canaria de La Palma.

Dana

La duda, como  señalaba Emilio rey en Xátaca, es si esa "tecnificación" de la comunicación es útil para quien lee o escucha, o si es simplemente puro espectáculo para aumentar las audiencias. Cuando hablamos de meteorología, el hecho de que hayamos empezado a oír hablar de 'DANAs' en lugar de 'Gotas Frías' o de que supiéramos lo que eran las "ciclogénesis explosivas" y ahora las “vaguadas polares”, es una buena noticia en términos de precisión meteorológica. 

Cuando estábamos en medio de la pandemia, muchos conocían de las diferencias existentes entre las vacunas ARN y ADN, y hasta Donald Trump y Bolsonaro, entre otros, se atrevieron a pontificar sobre los tratamientos frente al virus. En este caso no solo nos ilustraron los periodistas, también Fernando Simón hizo lo suyo en nombre del Gobierno. Todos los días nos anunciaba las buenas nuevas y las malas nuevas sobre Covid-19. También asistimos a la exactitud de los sucesivos pronósticos errados del Presidente sobre cuando estaría vacunada el 70% de la población.

Nueva fajana en la isla de La Palma

Ahora, a raíz de la Erupción del Volcán Cumbre Vieja, descubrimos nuevos términos técnicos.  Hoy si le preguntas a cualquiera si sabe lo que es una fajana, una colada, un tubo lávico o una bomba volcánica, seguro que te responde correctamente. Cualquiera te puede explicar la diferencia existente entre una erupción hawaiana y una estromboliana. Todos nos hemos convertido en expertos. Yo incluso creo que podría hablar durante 20 minutos seguidos de volcanes sin ser un experto.

Sin embargo, ¿hasta qué punto lo que ganamos en precisión lo perdemos en eficacia comunicativa frente al gran público? ¿Hasta qué punto corremos el riesgo de que las noticias  pierdan eficacia porque usamos una jerga para generar expectación pero que hay que explicar para que se entienda? ¿Es necesario dedicarle dos horas diarias durante dos meses a un programa de televisión por la erupción de un volcán y a sus consecuencias? Yo creo que no, pues por muy interesado que uno esté, pocos habrá que se puedan permitir el lujo de estar pegados al televisor entre las 9 y las 11 de la mañana, pues tendrán cosas que hacer.

El mejor ejemplo es lo que está ocurriendo en los medios, especialmente en las televisiones, con la erupción en la Isla de La Palma. Dos magazines de la mañana televisiva, Espejo Público de Antena 3, y el Programa de Ana Rosa de Tele 5, simultáneos ambos, compitiendo en personal y medios técnicos desplazados al lugar, con infografías espectaculares utilizando la realidad aumentada, proyectadas en el estudio en enormes pantallas, con recreaciones virtuales de la zona, y compitiendo por atraer a vulcanólogos y geólogos ante sus micrófonos y cámaras para ser entrevistados y preguntarles sobre unas previsiones que los técnicos desconocen. Entiendo que todo esto lo hacen por el sharing, por atraer al máximo número de espectadores, pero ello va en detrimento de la noticia, no del hecho noticiable. 

Todos hemos aprendido nuevos términos, fajanas, canales lávicos, bombas lácticas, etc. Todos hemos deseado que la dichosa lava alcanzara de una vez el mar, toda vez que se predijo la llegada un centenar de veces para acertar una sola. Tal parecía que era la conductora o el conductor del programa era el que realmente deseaba que eso sucediera para ser el que diera la noticia en primicia y en exclusiva en su programa.

Al final yo voy a reclamar mi título de grado de vulcanología, pues después de siete semanas, casi dos meses de curso intensivo, si me hacen el examen, seguro que lo paso con nota, pues soy muy aplicado, y tengo muy buena memoria.

Quizás sea la hora de que los periodistas repasen lo que están haciendo, pues creo que lo que hacen será otra cosa, pero periodismo no. Poca diferencia hay entre lo que hacen Susana Grisso o Ana Rosa en sus programas, y lo que hace Pablo Motos en El Hormiguero, que el suyo es un programa de entretenimiento, pero los tres están ahí para hacer preguntas.

Finalmente quiero felicitar a la Televisión Pública Canaria por la cobertura que dio y le está dando a este fenómeno, por su asistencia cediendo imágenes al resto de televisiones, y por como usó la Realidad Aumentada para dar grafismo a los hechos que estaban sucediendo para que se comprendieran mejor.