¿Es acaso la guerra solo cosa de hombres?
Luisondome
II Batallón de Mujeres de la Muerte en Moscú en 1.927 |
Enero 26, 2022
En el tiempo presente, son numerosos los conflictos que se extienden por el mundo. China e India por problemas en la frontera del Himalaya. El conflicto Yemení, en el que se dirime el predominio de la Arabia Saudí frente al de Iran. El eterno conflicto de Oriente Medio entre árabes y judíos, las guerras tribales del Sahel, o las del Cuerno de Africa, la reciente guerra de Afganistán, sin dejar de lado las tensiones existentes entre diversos países que aún no han iniciado la escalada hacia la guerra, como las tensiones de Bielorusia con Europa occidental, las tensiones entre Marruecos y Argelia con el Frente Polisario en medio, las continuas tensiones entre Turquía y Grecia, o ente Serbia y sus vecinos, las que existen desde la creación de sus estados entre India y Pakistán, o las de China con Taiwan o entre las dos Coreas. Estas son las mas importantes, pero no son las únicas, hay mas. Ahora se le suma un nuevo conflicto con altas probabilidades de terminar en guerra. Me refiero al conflicto existente entre Ucrania y Rusia.
La mayor parte de los conflictos citados son como consecuencia de ambiciones anexionistas sobre territorios de otro país. A esta causa se le une la necesidad de preservar o imponer zonas de influencia exclusiva de tal o cual superpotencia. Ambas parecen ser la causa del conflicto Ucraniano.
Pero dicho esto, yo me hago una pregunta: ¿Es acaso la guerra cosa solo de hombres?, ante tal pregunta, me puse a buscar y encontré un artículo de Mohorte que me llevó a un trabajo de dos investigadores: uno de la Universidad de Chicago, Oeindrila Huber, y el otro, S,P, Harish, del College William & Mary que se hicieron la misma pregunta que hoy me hice yo: ¿Hubo mas, o hubo menos guerras en Europa cuando gobernaron las mujeres?
Desde las guerras de la Antigua Mesopotamia, hasta el día de hoy, en lo que a la violencia humana se refiere, tal parece que el hombre ha tenido un mayor protagonismo que la mujer. Desde un punto de vista social, son los hombres quienes tienden a ejercer mas la violencia, bien contra ellos mismos, bien contra las mujeres por los mas diversos motivos. En cambio, si repasamos la historia, tal parece que no es así. Al menos esa es la conclusión a la que llegaron Huber y Harish en la revisión histórica de las guerras acaecidas en Europa en el periodo que va desde el año 1.480, hasta 1.913.
Se incluyeron para el estudio países que tuvieron al menos una mujer gobernante durante el periodo citado. Se analizaron en total los roles de 193 soberanos repartidos entre 18 de los estados europeos. De entre todos estos, las reinas representaron un 18% del total de los gobernantes, casi una quinta parte del total, pero que es suficientemente significativo para analizar las diferencias.
Cabe preguntarnos entonces cual fue la actitud de estas mujeres gobernantes ante una posible guerra. La respuesta que encontraron los investigadores, es que su actitud fue mas abierta, El dato concreto es que las mujeres fueron un 27% mas proclives que los hombres a participar en una guerra durante un año cualquiera en el periodo analizado, tanto si participaron como agresores, o como víctimas de ataques por parte de otros reyes soberanos.
Puede que las causas de este hayazgo estuvieran en que los reyes hombres presupongan mayor debilidad de la mujer gobernante en estas circunstancias, puede que hayan minusvalorarlo las competencias de una mujer a la hora de gobernar un estado.
A partir de este momento, los investigadores intentaron encontrar algunas de las claves de estos comportamientos. Una de las encontradas fue el estado civil de los monarcas, y citan: "Entre los monarcas casados, las mujeres tendieron más que los hombres a batallar como agresores. Entre los monarcas solteros, las reinas tuvieron que luchar más que los hombres en guerras donde sus territorios fueron atacados" . Dicho de otro modo: las mujeres solteras fueron mas atacadas, pero las mujeres casadas fueron mas decididas a ir a la guerra.
La diferencia la explican los investigadores por la percepción cultural de la época. A las mujeres solteras se las consideraba mas débiles que los hombres (estuvieran estos solteros o casados), y que a las mujeres que estuvieran casadas. En Europa en aquella época, a las mujeres de la corte se las relegaba a un segundo o tercer plano, pues no tenían ni voz ni voto en los asuntos de estado. Algunas de ellas si llegaron a ejercer cierta influencia sobre su rey consorte, pero fuera de eso, su impacto en los asuntos de estado era mínimo. Si que alguno de los reyes consortes participaron mas en las capacidades militares, pero las capacidades administrativas, las burocráticas y financieras, así como la negociación de las posiciones políticas, generalmente estuvieron bajo el control de la soberana.
Se puede afirmar que a lo largo de la historia se mantuvieron los prejuicios históricos hacia las capacidades de gobierno de las mujeres. Un misógino acérrimo fue el Rey Federico II de Prusia, que llegó a decir que "ninguna mujer debería de tener permitido que gobernara nada"; el decidió invadir Silesia en 1.740 aprovechando la muerte sin descendencia del Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Carlos III, y el ascenso al trono, mediante pragmática sanción, de María Teresa.
Pocos ejemplo nos ofrece la historia de que una pareja de reyes gobernantes ejercieran su cargo si diferencias de género. El mas significativo de todos sucedió en España durante el Reinado de los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, una pareja de reyes consortes que acuñaron un lema para su reinado: Tanto monta, monta tanto. Dicho de otro modo: tanto manda ella, como manda el.
Hoy la situación es muy diferente. Según la ONU, en Marzo de 2021 solo un 6% de países tienen a una mujer como jefe de Estado y apenas un 7% presidiendo un Gobierno En total, de 193 países, solo 22 mujeres ocupan una de esas dos funciones, dos más que el año pasado y representan el 1,4% del total de países. Por regiones, Europa, especialmente la del norte, es la que más mujeres tiene en altos cargos en todo el mundo. En cuanto a los Parlamentos, la mayor representación parlamentaria femenina global corresponde a Nicaragua, país en el que Rosario Murillo, mujer de su Jefe de Estado, Daniel Ortega, ejerce sobre el una fuerte influencia.
Recientemente Europa ha perdido por haber llegado al final de su mandato a una de sus mas enérgicas líderes, la Canciller Angela Merkel, siendo esta substituida en el cargo por un varón: Olaf Scholz. Teniendo Alemania una fuerte influencia en la toma de decisiones en el Comisión Europea, órgano de gobierno de Europa cuya presidencia es ocupada por otra mujer Ursula Von Der Leyen, es arriesgado aplicar las conclusiones de este estudio a la predisposición que hoy pudieran tener las mujeres gobernantes para ir a una guerra.
En el caso del conflicto ruso-ucraniano al frente de Rusia esta Vladimir Putin que ejerce su liderazgo con potencia y ambición. Al frente de Ucrania está Volodimir Zelenski, un actor, comediante, guionista, productor, director y político ucraniano que se desempeña en el cargo desde mayo de 2019, y que ahora se encuentra sometido a fuertes tensiones que pueden hacer que su país entre en guerra con su vecino mucho mas poderoso y ambicioso. Hoy parece que son los hombres los mas propensos a ir a una guerra, pero nada hace presuponer que si estos dos países estuvieran gobernados por mujeres, el resultado del conflicto fuera diferente, o quizás si lo fuera.
Fuente: Reinas
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