Nestlé: una de las empresas más malvadas del mundo. Del trabajo infantil a la mortalidad infantil
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| Foto de Joshua Oluwagbemiga en Unsplash |
Toda la idea detrás de Nestlé en la década de 1970 es que era una empresa noble y algo altruista. Se propuso ser un soplo de aire fresco para aquellos bebés cuyas madres no podían amamantarlos, y según todos los indicios, lo fue. Sin embargo, su público objetivo era extremadamente pequeño en comparación con la población, por lo que necesitaban una forma de expandirse y, para hacerlo, tenían que lidiar con su principal competencia: la leche materna. Y así comenzó la espiral descendente en lo moral que les hizo ensuciarse las palmas de las manos cada vez más.
La leche materna parecía un obstáculo insuperable, quiero decir, ¿cómo podría siquiera comenzar a comparar la leche de vaca y el azúcar con la bondad natural que es la leche materna? ¿Cómo podría convencer al público para que elija su producto sobre algo que recomendarían 11 de cada 10 médicos?
Pues :onsiguiendo que los médicos hagan el trabajo sucio ellos mismos. Cuando escuchas las palabras "modelo a seguir", te vienen a la mente algunas categorías de personas: artistas, atletas, políticos, líderes religiosos, actores, científicos y médicos. Para la mayoría de las personas, cuando lo dice o lo hace un líder religioso, definitivamente es correcto, cuando lo dice o lo hace un médico, definitivamente es saludable, ¿puedes ver a dónde quiero llegar con esto?
A los médicos se les pagaba en masa para vender y promocionar el producto, y si tiene dudas sobre cuán influyentes son los médicos, pregúntese por qué los cigarrillos eran un ícono cultural en su día, pregúntese por qué era uno de los productos más deseados y un símbolo de clase. Todo fue posible porque se pagó a médicos reconocidos para promoverlos, y parecía que Nestlé aprendió algunas lecciones de ellos.
Se inició una campaña masiva, se contrató a profesionales médicos no solo para sugerir la fórmula de Nestlé como una alternativa viable, sino también, en casos extremos, para reducir la reputación de la leche materna. Los vendedores y las vendedoras se vistieron con atuendos médicos y se trasladaron rápidamente a regiones menos educadas y subdesarrolladas como África para cantar las alabanzas de su producto.
¿Conduciría esto en última instancia a la desnutrición y la muerte de innumerables bebés? Sí, ¿a Nestlé le importaba eso? No. Tu invitado es tan bueno como el mío. Los casos de desnutrición obviamente iban en aumento, y dado que la mayoría de los africanos en ese momento eran analfabetos, fueron los más afectados.
Aparte del hecho de que la fórmula en sí misma era muy deficiente en nutrientes, el agua en la mayoría de los países africanos no estaba limpia, y en lugar de que la empresa instruyera a los "médicos" enviados allí para enseñar a los indígenas a hervir siempre el agua antes preparación (para matar microbios dañinos), Nestlé edulcoró despreocupadamente las instrucciones en el envase, sabiendo muy bien que la mayoría de las madres no las podían leer.
Obviamente, este hecho tenía la intención de eludir una demanda, y no porque se preocuparan por sus consumidores.
Los casos de bebés que se enfermaban y morían (especialmente en África) llegaron a ser tantos, que los ejecutivos fueron llamados por el Senado en 1978 para dar una explicación, y su defensa fue que sí escribieron las instrucciones en la parte posterior del contenedor. Esta fue una de las acciones que llevó a la ONU a prohibir que las empresas intentaran comparar sus productos de fórmula con la leche materna.
Luego, Nestlé decidió montar un espectáculo, una artimaña que los vieran como se transformaban en defensores de la lactancia materna. Pusieron varias campañas, e incluso crearon un comercial de bebés para transmitir su punto de vista. Sabían muy bien que el mundo tiene sus ojos puestos en Estados Unidos y Europa, y montar un espectáculo así, aliviaría la carga sobre sus espaldas.
Esto lo hicieron mientras cambiaban gradualmente su mercado a lugares como Asia y África, donde las ventas se dispararon. Eran (y son) aún capaces de manipular su camino en el mercado de la fórmula en América y Europa, donde se han aprobado leyes estrictas contra algunas de sus acciones.
Además de hacer millones vendiendo productos que pueden ser dañinos para los bebés, Nestlé también logró sumergir sus sucias patas en otra necesidad humana: el agua.
El agua (especialmente el agua embotellada), es muy lucrativa si conoces sus entresijos. No es demasiado costoso comenzar, los productos no son exactamente perecederos y las materias primas están fácilmente disponibles. Sin embargo, se debe trabajar en el envasado, la purificación del agua para que esta sea segura para el consumo, y la fortificación de la misma con los micronutrientes necesarios.
De lo bien que haga esto, se podría determinar su éxito en el negocio, ya que estas son las únicas cosas que los clientes usan para diferenciar el agua embotellada de Tom de la de Jerry, así como del agua del grifo común.
Nestlé no estaba muy interesado en seguir ese camino, pues querían grandes ganancias con costos operativos muy bajos. Esto los llevó a agua caliente legal, ya que fueron demandados en 2012 por embotellar agua del grifo y venderla como fuente natural de manantial. Nestlé, en su forma habitual, decidió centrar su mercado en países del tercer mundo donde pudieran perpetuar su maldad en paz.
En 2013, se informó que Nestlé desviaba constantemente agua potable limpia de pueblos y ciudades de Pakistán, y la volvía a empaquetar en sus fábricas para luego la venderla a las comunidades a un alto precio.
Los que no podían permitírselo se vieron obligados a beber agua sucia y contaminada con lodos. Nestlé básicamente les robó lo que era suyo por derecho y comenzó a vendérselo en botellas de plástico.
De acuerdo, puede que no haya usado leche-fórmula para bebés o el agua embotellada Nestlé, pero es muy probable que haya comido kit kat, barra o una barra láctea. En caso afirmativo, lamento decirle que es posible que haya contribuido indirectamente al trabajo infantil.
La materia prima para lo anterior es el cacao, y el cacao se cultiva principalmente en la lejana África. Todo el proceso de importación se lleva una parte de las ganancias de Nestlé, por lo que, para ahorrar dinero, recurrieron a acuerdos con granjas que aprovechan el trabajo infantil para cosechar los granos de cacao.
Esto finalmente obtuvo reconocimiento mundial y, una vez más, Nestlé estaba bajo fuego. Para calmar a los agraviados, Nestlé decidió recolectar cacao de las pocas granjas que no aprovechaban el trabajo infantil, usarlos para hacer kit kat y luego usarlo como su símbolo de la guerra contra el trabajo infantil, ya sabes, para salvar las apariencias. Mientras tanto, estaban (y probablemente están) todavía usando cacao procedente del trabajo infantil para sus otros productos de chocolate.
Conclusión
A pesar de su turbio pasado, Nestlé sigue siendo la compañía de alimentos más grande del planeta con un valor neto estimado de $ 270 mil millones a partir de enero de 2021. Opera en unos 190 países, ha empleado a más de 300.000 personas y tiene cerca de 380 fábricas en todo el mundo.
Sus ejecutivos admitieron abiertamente que cerca del 60% de sus productos no son saludables, pero existe un amor incondicional del público hacia la marca.
Supongo que es porque tienen muy buenas relaciones públicas.
El artículo original se puede leer en inglés en Medium / Dialogue & Discourse
Artículo traducido por L. Domenech
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